Hoy extraño de forma simbiótica tu sonrisa.

Necesito que me hagas un escudo con tus brazos

Y me hagas sentir tu cuidado eterno.

Cuando más sola me siento,

Pienso que de seguro tu energía me va a cubrir cada célula

Para no soltarme nunca.

Esta noche te invitaría a jugar a la música…

Probablemente me harías sentir única

Y después de muchos abrazos,

Te pediría que me sueltes…

Pero vos insistirías con esa forma tan infantil que solías aplicar para invertir los roles.

A veces quiero volver a mi primer hogar,

Llenarte el cuerpo de amor

Y regalarte un poco de esa paz que siempre me reclamaste.

Quiero que cuando tome la última bocanada de aire

Seas vos quien me venga a buscar.